Familia, una comunidad de personas

Serie de Talleres "Familia vive tu misión" , Obras Misionales Pontificias, Nro. 6

Introducción

La familia se caracteriza por ser una comunidad de personas, en donde cada uno tiene la responsabilidad de hacer crecer en unidad y amor recíproco, mediante el apoyo constante y ayuda mutua.

La familia tiene una misión “vivir, crecer y perfeccionarse como comunidad de personas que se caracterizan por la unidad y la indisolubilidad junto con los seres amados”. (17) Así nos lo manifiesta Familiaris Consortio.

Canto

"El camino de la vida"

Motivación

El Coordinador, con anterioridad, sacará cinco fotos del álbum familiar o grupo con el que vive y que representen diferentes momentos de la vida. Todos observan y comentan lo que recuerdan de cada foto.

Esta dinámica nos permite destacar el valor de cada persona y cómo la familia va creciendo y cambiando. Se destaca al final que existe entre sus integrantes un gran compromiso: Todos tenemos que ayudar a crecer a los otros.

Oración

Iniciemos este encuentro dando gracias a Dios por cada uno de los miembros de nuestra familia y pidámosle que nos permita vivir siempre en unidad, integrándonos en el amor y en el servicio.

Testimonio misionero familiar

Cada uno de los integrantes de la familia expresa la experiencia que tuvo en la realización del compromiso asumido en el encuentro anterior.

Lectura de la Palabra de Dios

1 Cor 12, 12-27.

Complementamos

¿Qué le dice Jesús hoy a cada uno y a la familia?

En la lectura anterior el Señor pone de presente que cada parte del cuerpo es importante, que todos los miembros tienen que crecer unidos a las demás partes y que es Dios mismo quien nos lo permite ayudando a que cada parte ocupe su puesto y cumpla lo que le corresponde.

La familia, así mismo, se iguala al cuerpo, tiene diversidad de personas que forman una sola comunidad y en la cual cada uno tiene la responsabilidad de hacer crecer en unidad y en amor recíproco a través del apoyo constante y la ayuda mutua.

La misión de la familia como nos dice Familiaris Consortio es:" Vivir, crecer y perfeccionarse como comunidad de personas que se caracterizan por la unidad y la indisolubilidad junto con los seres amados" (17)

Vemos entonces que así cada miembro del cuerpo tiene su función, así cada persona en la familia desempeña su misión para la cual fue creada: la mujer como madre, esposa, y en sus tareas profesionales; el hombre como esposo y padre, siendo promotor de la unidad familiar; los niños, evangelizando a sus padres y desarrollando todos sus valores; y el anciano como testigo del pasado e inspirador de sabiduría para el futuro.

Dialoguemos

  1. ¿Qué estoy aportando para construir la unidad familiar?
  2. ¿Qué pasos puedo dar para valorar cada día más a los miembros de mi familia?
  3. ¿En qué se parece el cuerpo a la Iglesia Universal?

Compromisos

En una hoja, realicemos una lista de los miembros de nuestra familia y coloquemos al frente el día de esta semana que lo vamos a servir mejor y a orar especialmente por él. Todos los días oraremos por las familias del mundo para que seamos un solo cuerpo.

Coloquemos en la cartelera familiar: "Somos muy importantes para nuestra familia, coloquemos nuestros valores al servicio de la unidad familiar".