FUNDACIÓN HOMBRES Y MUJERES DE FUTURO

Guía de predicación, septiembre 18 al 23 – 2023

Texto de referencia: Hch.2, 2-4

Hemos sabido que hay algunos predicadores ansiosos de predicar sobre el Espíritu Santo. Hoy proponemos esta reflexión del Padre Fidel Oñoro, para que puedan profundizarla, indagando e investigando para aprender cada vez más y dar una enseñanza un poco diferente sobre el Espíritu del Señor. Llevamos 26 años hablando y enseñando sobre el Espíritu Santo, permitámosle que haga cosas nuevas en cada uno para refrescar nuestra predicación.

Un abrazo fraterno para todos.

SOMOS UNA HUMANIDAD NECESITADA DEL ESPÍRITU SANTO

El autor persa Bayazid Bostami (Filósofo), oraba a Dios en su juventud (lleno de ímpetu y de ganas de comerse el mundo) diciendo: Oh Dios, dame la fuerza de cambiar el mundo. Cuando cumplió 40 años y vio que no había podido cambiar absolutamente nada del mundo, decía: Oh Dios dame el poder de cambiar a las personas que me rodean, mi familia, mis amigos… y cuando se hizo anciano, decía ahora mi única oración es esta: Oh Dios dame tu gracia para cambiarme a mí mismo. Viendo todo lo que el Señor obraba en él, decía: Oh mi Señor, si desde tan joven yo te hubiera orado así, cuánto tiempo me habría ganado.

Quien con la gracia de Dios cambia su forma de ser y de pensar, podrá cambiar muchas cosas de su entorno, el ambiente en que vive, su familia y en su trabajo.

Todos sentimos la necesidad de un cambio importante en nuestro país, en nuestra ciudad, en nuestro barrio, en nuestra familia, pero pocos hacemos conciencia de que ese cambio debe empezar por nosotros mismos. Se hacen cambios en las políticas, cambios en las leyes, en las costumbres, pero no nos damos cuenta de que necesitamos cambiar los corazones. Ese cambio tan necesario se dará cuando, como el filósofo Bayasid Bostami digamos: oh, Dios mío, dame la gracia de cambiar yo, de manera de pensar y de actuar.

Hoy el Señor nos está diciendo: sí, tu país, tu ciudad, tu familia y el mundo entero necesitan un cambio, pero yo quiero cambiarte es a ti, quiero hacerlo entrando profundamente en tu vida. El Espíritu Santo que renueva la faz de la tierra quiere entrar en ti y recrearte llenándote con su presencia, su poder y su amor. Dios transforma personas y lo hace llenándolos de Él desde el corazón.

Hechos 2,2-4ª: De repente vino del cielo un ruido como una impetuosa ráfaga de viento, (Ruah, soplo creador de Dios) que llenó toda la casa en la que se encontraban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego, (en la Biblia, luz, calor, amor) que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos; se llenaron todos de Espíritu Santo.

El Espíritu Santo viene a ti y te llena completamente, sobretodo con la grandeza de su Amor. Se llena una casa de Espíritu Santo, pero ocurre persona a persona. Uno por uno. Es el océano inmenso del amor de Dios que se vacía en tu corazón. Quiere obrar en toda tu vida, tus proyectos y purifica y limpia lo que no es de Él, todos esos virus que habitan en ti.

“LA CREACIÓN LLEGA A SU CULMEN CUANDO EL CREADOR TOMA POSESIÓN DE LO CREADO”

Crear para Dios, es acontecer en la historia tuya y de tu familia, miembro por miembro.

Tomar posesión significa habitar, y habitar significa reinar. Él quiere dirigir tu vida porque nadie conoce como Él el proyecto que tiene para ti.

Él toma tu vida, la purifica, te llena de su amor y le da sentido a tu vida para que llegue a ser vida plena, vida en abundancia.

  • Dios quiere habitar en ti, hacerte su morada.
  • Si tú estás lleno(a) de Dios, ¿qué saldrá de ti? Amor, paz, ternura, perdón, esperanza.

Llena tu vida de oración, de Palabra de Dios, de contemplación y silencio. Proclama la Palabra

(Tomado de una Charla sobre el Espíritu Santo. Fidel Oñoro, octubre 2022)