COMUNIDAD HOMBRES Y MUJERES DE FUTURO

MINISTERIO DE PREDICADORES

GUÍA DE PREDICACIÓN - MARZO 19 / 2013

 

¡QUIEN TE HA ELEGIDO TE NECESITA!

 

Objetivo:

Concientizar a cada uno del llamado que Dios le ha hecho para continuar su obra salvífica, en medio de una sociedad atacada por el consumismo, políticas y culturas, que ahogan la fe y los valores cristianos.

Introducción:

EL PAPA Benedicto XVI nos ha introducido a redescubrir el camino de la fe, para que iluminados por Cristo, seamos iluminadores de los demás. (PORTA FIDEI)

Desarrollo del tema:

En Mt 5, 13 ss. Jesús nos dice:

  • Que debemos ser sal para el mundo, que sepamos dar gusto y sentido a la vida. Que contagiemos el gusto de Dios y a la vez el sabor humano, que da esperanza, amabilidad y alegría.

    Que seamos personas que contagiemos felicidad y visión optimista de la vida. Como la sal, debemos preservar de la corrupción siendo esa voz profética que anuncio y denuncia en medio de la sociedad.
  • Se nos pide que seamos luz para los demás. El que dijo que era la luz verdadera (Jn 3, 11) nos pide creer para que seamos sus seguidores y sirvamos para dar luz e iluminar a los demás.
  • Todos sabemos qué clase de ceguera, penumbras y oscuridades reinan en nuestro mundo y también dentro de nuestros mismos ambientes familiares o religiosos. Nadie está exentó, todos necesitamos a alguien que encienda  una luz a nuestro lado para no tropezar ni caminar en tinieblas.
  • Ser luz no lumbreras; no se espera de nosotros que deslumbremos, si no que alumbremos, pues hay personas que lucen mucho e iluminan poco. “pero el que obra la verdad va a la luz” Jn. 3, 21.
  • Se nos dice que seamos como una ciudad puesta en lo alto de un monte, como punto de referencia que guía y ofrece cobijo. Se pide esto a la iglesia, “Año de la fe” (PORTA FIDEI) pero también se pide eso mismo de las familias y comunidades Cristianas.
  • Qué hermoso el testimonio de hogares que siempre están abiertos y disponibles al servicio, la acogida y la ayuda mutua.
  • Cada uno de nosotros estamos llamados a ser sal, luz, comunidad; debemos responder a ese llamado de forma personal.
  • Que tu luz permita iluminar a los otros, que seas sal y luz de nuestra comunidad, que su vida aporte a la construcción del reino de Dios.

  

 

     Bibliografía

Biblia Jerusalén.

Carta apostólica PORTA FIDEI.

Reflexiones padre Lineros.